El Polar M200 es el más pequeño de los relojes para corredores de Polar y es equiparable al Garmin Forerunner 35. Dispone de GPS, frecuencia cardíaca en la muñeca, seguimiento de actividad 24/7 (como el Fitbit), notificaciones inteligentes del teléfono (llamadas, whatsapp,…) y guía de entrenamiento para 5kms, 10kms, medio maratón y maratón. La autonomía de la batería con el GPS es de unas 6 horas. Además, cuenta con algunos extras interesantes como altitud y sus más de 100 perfiles de deportes. Es sumergible y se puede nadar con él. Ver todas las funciones. Cuesta 99€ en Amazon.
Etiqueta: Polar
El nuevo Polar M400 incorpora un GPS de alta sensibilidad así como soporte para diferentes tipos de deporte, aunque quizás lo más interesante es que está pensado para ser llevado durante todo el día y contabilizar nuestro nivel de actividad. Permite programar objetivos de entrenamiento, grabar la ruta con tiempos y velocidades, activar la función de «volver al punto de salida» (por si nos perdemos) y agendar actividades. Todos los datos son accesibles a través de la app Polar Flow a la cual se conecta a través de Bluetooth. Ver vídeo (por favor!!!). Sin duda un gran reloj que debería considerarse si estamos pensando en un buen GPS para correr. Cuesta 148 € sin pulsómetro y 192 € con pulsómetro.
La Polar Beat es una aplicación, de momento, solamente disponible para iPhone 4S e iPhone 5 que permite planificar entrenamientos, hacer el seguimiento, guardar circuitos (utilizando el GPS) y compartir las sesiones con amigos (vamos,… lo que últimamente hacen todas las apps). Lo realmente interesante es que es compatible con el sensor de pulso HR H7 y que por tanto te permite llevar el seguimiento de tu frecuencia cardíaca directamente en el teléfono y combinarlo con el resto de datos del entreno. La aplicación es gratuita y se puede descargar directamente desde iTunes.
El Polar H7 HR Sensor es un sensor de frecuencia cardíaca de cinta que transmite los datos a través de Bluetooth por lo que puede ser utilizado conjuntamente por aplicaciones móviles (por ejemplo en tú iPhone), cintas de correr de «gimnasio» y otros dispositivos Polar. Tiene un precio de 65 € en Amazon.
El nuevo Polar RC3 GPS es el primer modelo de la marca que integra GPS en el mismo reloj. En apenas 58 gramos y un tamaño similar a los Garmin, el reloj incorpora todas las características básicas que se esperan de un un GPS: diario de entrenos, descarga a PC, map tracking, etc. Existe una versión con cinta de pulsómetro y otra con sensor de cadencia para la bicicleta. La duración real de la batería es de unas 13 horas, muy superior a la de sus competidores y la precisión del GPS muy buena. Sin embargo, tiene algunos problemas con su resistencia al agua (por ejemplo, en el micro USB que incorpora). Por ahora corre con una versión beta de su firmware pero se espera que durante el mes de septiembre-octubre se lance la versión mejorada. Sin pulsómetro, su precio será de 225 € en España.
El Polar FT7 es uno de los relojes deportivos más vendidos de la marca gracias a su sencillez. Es un excelente pulsómetro que no tiene ni GPS ni conexión a podómetro pero que permite la medición de la frecuencia cardíaca incluso mientras nadamos. Viene equipado con un montón de funciones que nos ayudarán a entrenar basándonos en las pulsaciones que estamos desarrollando en cada momento y que después podemos volcar al ordenador para su análisis. En este vídeo se pueden ver buena parte de sus aplicaciones. Se puede comprar por 70 € en Amazon España.
El reloj Polar RCX 5 está diseñado para triathlon y por ello dispone de programas específicos para correr, nadar e ir en bicicleta. Es inevitable compararlo con el 910XT aunque su principal diferencia es que el RCX 5 necesita de un GPS externo (el G5) para poder realizar mediciones exactas de distancia y velocidad. Por supuesto incluye pulsómetro (a través de banda cardíaca) totalmente operativo en el agua, cosa que no sucede con el GPS, y conexión a otros sensores (cadencia ciclista, podómetro, etc.). En este vídeo se puede ver el reloj más de cerca. El reloj, el GPS G5 y la banda cardíaca cuestan 390 € en Runnering España y 428 € en Wiggle.
El Polar GPS G5 es un sensor GPS de 34 gramos que funciona con algunos relojes Polar (como el RCX 5) y que ofrece información de distancia y velocidad. Para utilizarlo es necesario llevarlo en algún tipo de brazalete o bolsillo sin llegar a estar muy tapado para que pueda recibir bien la señal de satélite. La duración de la batería (recargable a través de USB) es de unas 20 horas. Respecto a sus versiones anteriores (G1 y G3) ha mejorado bastante su precisión y sobre todo la cobertura en espacios boscosos o entre edificios. Cuesta 132 € en Runnering y 145 € en Wiggle.
A la espera de que tengamos por aquí la versión G5 del sensor GPS de polar (en unos poco meses), nos tenemos que conformar con el GPS G3 W.I.N.D., una versión mejorada del G1 que incorpora el sistema GPS SIRF III para una mayor sensibilidad y cobertura del posicionamiento. Comparándolo con la versión anterior, notaremos que la señal cuesta un poco más en perderse en zonas difíciles tales como bosques o calles estrechas. La lista de relojes compatibles con este GPS está aquí (obviamente todos son de Polar). Cuesta 130 € en Wiggle.
El Sensor GPS G1 de Polar ya hace mucho tiempo que está disponible pero aun no había hablado de él. Es un dispositivo GPS que se puede poner en la zapatilla, ropa o bicicleta y que envía datos a los modelos FT80, FT60 y RS300X para controlar velocidad, ritmo y distancia. Si bien a nivel de sensibilidad de GPS el sensor es muy exacto, a nivel de prestaciones en el reloj está bastante lejos de los modernos Garmin. Tiene un precio de 105 € en Amazon.
Nike y Polar han creado el Wearlink+ Nike+, un sensor de frecuencia cardiaca que se coloca en el pecho y que es capaz de enviar la indicación de nuestro pulso al receptor Nike+ que utilicemos, sin necesidad de disponer de un reloj Polar. De momento, aún es algo complicado comprarlo pero tiene un precio entorno a los 60 euros en la tienda Nike USA.
El nuevo Polar FT4M es un pulsómetro específico para running (aunque también se puede utilizar para ciclismo) que nos permite analizar nuestro progreso en el entrenamiento a partir de las variaciones de la frecuencia cardíaca. Es un reloj y cronómetro sencillo y bonito para corredores que están comenzando y que requieran saber su progresión cardiaca. No almacena velocidades intermedias por kilómetro (o vuelta) aunque sí tiene memoria para 10 entrenamientos. Se puede comprar por 80 euros en España y 84 euros en Inglaterra.
El Polar Personal Trainer es una aplicación web desarrollada por Polar para gestionar nuestro plan de entrenamiento, ayudándonos a identificar objetivos y haciendo después el seguimiento de ellos. Lógicamente, el máximo rendimiento de la aplicación lo tendremos si además utilizamos un reloj Polar que podamos conectar al ordenador. Personalmente, creo que es una de las mejores aplicaciones de control de entreno para correr que hay ahora mismo tanto desde el punto de vista de funcionalidad como de usabilidad. Su uso es gratuito y se puede entrar desde https://www.polarpersonaltrainer.com.
El Polar Flowlink es un dispositivo que se conecta al ordenador personal a través del puerto USB y que permite la transmisión de datos entre nuestro pulsómetro Polar y el sitio web polarpersonaltrainer.com. Desde ahí se pueden organizar y compartir entrenamientos, experiencias, etc. Cuesta 50 euros en Bikila.
El Polar RS300X es un reloj para los que no se quieran gastar mucho dinero y que incorpore compatibilidad con sensores GPS, de frecuencia cardíaca y de podómetro inercial. A nivel de funcionalidades dispone de todas las esenciales y pese a que Polar lo define como el «reloj para el deportista amateur», dudo que necesites realmente más funcionalidad por muy profesional del correr que seas. Dispone de varios programas de entrenamiento, monitor de consumo de calorías, memoria doble para las últimas 16 semanas de entrenamiento y para las últimas 16 sesiones y además se conecta directamente al ordenador. En Wiggle UK se puede comprar por 119 euros, gastos de envío incluídos y si compras también el sensor GPS, el total sale por 184 euros.
Este sencillo reloj de Polar no tiene ni banda de pecho, ni sensor de pie, ni GPS. Dispone de un sensor de actividad que detecta si estás parado, andando o corriendo. Permite la programación de entrenos en tiempo o distancia gracias al calculador de kms, que aunque no es muy exacto, va bien. Es bonito e innovador. Se puede comprar por 95 euros en Todo-Deporte.
Uno de los mejores relojes de Polar es el RS800CX Run sin GPS. Ayuda a planificar, controlar y analizar cada parte del entrenamiento. Dispone del sensor de velocidad s3 W.I.N.D. Incorpora medición de frecuencia cardiaca, sincronización con el PC, diseño de entrenos y medición de altitud. El Kit Incluye la pulsera RS800CX, cinta elástica WearLink+, transmisor WearLink W.I.N.D., sensor de velocidad Polar s3, software Polar ProTrainer 5, puerto de comunicación Polar IrDA con cable y CD para instalación. Cuesta 490 euros y se puede comprar en FitnessKit. Más información en Polar.
Un reloj-cronómetro bonito con compatibilidad para receptor de GPS y pulsómetro. El Polar FT80 es ideal tanto para entrenamientos cardiovasculares como de fuerza a través de múltiples funcionen que miden el comportamiento del corazón y la calidad del entrenamiento (a través del GPS).
El nuevo programa de entrenamiento Polar STAR Training marca tus objetivos semanales de entrenamiento, adaptándose a tus hábitos de tiempo disponible para guiarte sin ser demasiado estricto, permitiéndote flexibilidad de entrenamiento durante la semana. Cuesta 300 euros y se puede comprar en Fitness Digital. Fuente: Corredores Novatos.