Running, Zapatillas, Nutrición,…
Las nuevas K-Swiss Blade Foot Run son unas zapatillas minimalistas totalmente planas con amortiguación básica que solo deben usarse por corredores acostumbrados a correr aterrizando con el antepie. Tiene un peso de 226 gramos y aunque son muy cómodas para pesos por debajo de 75 kgs, se han reportado algunos problemas de durabilidad de la suela para personas por encima de 80 kgs. Se pueden comprar, muy baratas, por 57 € en ChainReactionCycles.
La K-Swiss K-Ruuz 1.5 es una zapatilla de competición de 156 gramos con una amortiguación en el talón tan suave que asemeja a una suela casi plana. En esta versión se le ha añadido un extra de control y estabilidad que hacen que pueda ser usada tanto por neutros como por pronadores hasta 65 kgs en pruebas no superiores a los 20 kms. El upper es resistente al agua sin llegar a ser totalmente impermeable. Cuesta 79 € en Wiggle.
Las nuevas (y espectaculares) K-Swiss Kwicky QT2 aprovechan la estructura de la Kwicky B-L pero con una parte superior (upper) totalmente diferente donde resalta el innovador sistema de lazado diseñado para optimizar las transiciones en el triathlón. Con 275 gramos, es una zapatilla muy estable para neutros o pronadores hasta 70-75 kgs que compitan en distancias hasta el medio maratón (o mejor dicho hasta el 1/2 Ironman). Para los interesados, hay un buen análisis de la zapatilla en Foro Atletismo. Se puede comprar por 110 € en Wiggle.
Las nuevas K-Swiss Blade-Max Glide complementan la serie Blade-Max con una zapatilla muy amortiguada (para lo que es K-Swiss) para corredores neutros. Diseñada para pesos entre 65 y 75 kgs, es ideal para entrenamientos regulares hasta 20 kms y ritmos rápidos (alrededor de 4’/km). El upper está muy bien hecho y eso se nota en el ajuste. Se pueden comprar por unos 90 € en Amazon
La recién aparecida K-Swiss Blade-Max Stable se incorpora a la serie de máxima amortiguación de la marca en su versión para pronadores. Está concebida para corredores hasta 80 kgs que busquen una zapatilla muy estable, ligera (298 gramos) y flexible con la que entrenar regularmente distancias hasta los 15-20 kms. Siendo K-Swiss una de las marcas preferidas por triathletas de todo el mundo, esta es una buena opción para los más grandes con tendencia pronadora. Se puede comprar por 112 € en Wiggle.
La K-Swiss Blade Light Race es una zapatilla de triathlon de tan solo 252 gramos construida sobre la plataforma de la Blade Light Run pero con un upper distinto al que le han eliminado los cordones y sustituido por un velcro. Es apropiada para corredores neutros que busquen una zapatilla ligera y amortiguada con la que realizar una transición rápida (gracias al velcro) y una carrera veloz (gracias al peso reducido) y que puede ser usada por pesos inferiores a 65-70 kgs (hasta maratón) o hasta 90 kgs (en 10 kms). Cuesta 71 € en Wiggle.
La nueva K-Swiss Blade-Max Trail reivindica lo clásico en trail running: una buena suela que nos haga insensibles a las imperfecciones. Cualquiera que haya hecho más de 20 kms con desniveles fuertes, piedras y rocas sabe que sin buena amortiguación la planta de los pies se va resentir con el impacto de las piedras. Eso precisamente es lo que aporta esta interesante zapatilla destinada a corredores neutros o ligeramente pronadores hasta los 85 kgs que entrenen o compitan distancias largas (más de 20 kms) en circuitos con terreno irregular. Tiene un peso de 375 gramos y un upper fuerte. Cuestan 96 € en Wiggle.
Las K-Swiss Blade Light Recover son unas zapatillas de descanso muy amortiguadas y ventiladas pensadas para ponérselas después de cualquier prueba de larga duración. Son un gran capricho, por ejemplo, para usarlas después de correr una maratón cuando tienes que volver a casa o símplemente para salir a pasear por la tarde. Cuestan 52 € en Wiggle.
La K-Swiss K-Ruuz es una zapatilla de competición ultraligera de tan solo 185 gramos para corredores neutros con arco alto que sólo debería ser utilizada por personas por debajo de 65 kgs en carreras inferiores a 10 kms. Es muy transpirable (por encima y por la suela) y ligera y aunque se supone que la suela es de larga duración, la zapatilla está para tirarla a la basura con 150-200 kms. Se puede comprar por 63 € en Wiggle.
La nueva K-Swiss Kwicky Blade-Light es una zapatilla de competición de 256 gramos para pronadores que busquen algo estable y muy rápido para correr distancias hasta los 10-20 kms. La comodidad, excelente, sigue la línea de K-Swiss para corredores no muy pesados, por debajo de 70 kgs que no precisen de una gran suela. Cuesta 88 € en Wiggle.
La K-Swiss California, con 327 gramos, es una zapatilla muy estable adecuada para pronadores leves con arco plantar medio. La amortiguación es suficiente para entrenar distancias entre 10 y 20 kms en corredores hasta los 70-75 kgs. Uno de los aspectos más destacables es la comodidad y el efecto «guante» en el pie. Vale 88 € en Wiggle y 90 € en Amazon
Las K-Swiss Tubes Run 100 se suben a la moda de agregar virguerías en las suelas de las zapatillas para hacerlas más atractivas visualmente al consumidor. Las Tubes Run 100
Reconozco que esto es sólo para fanáticos del running o del triathlon: las nuevas Sandalias K-Swiss Ironman Zorrie están pensadas para ser usadas en el vestuario del gimnasio (y ducha) o símplemente cuando hemos terminado una carrera larga y necesitamos que nuestros pies descansen y respiren. Con una suela algo más amortiguada que las típicas «chanclas», marcaremos estilo cuando las llevemos puestas. Cuestan 16 € en Wiggle.
Esta novedosa y cómoda zapatilla, la K-Swiss Blades Light Run, pesa sólo 263 gramos y dispone de suficiente amortiguación para competir en distancias de hasta 20 kms o para entrenamientos muy rápidos. Pese a que se anuncie como una zapatilla de entreno super-ligera, estas palabras deben ser matizadas porque sólo pueden y deben ser consideradas como tales por corredores por debajo de 65 o 70 kgs que no precisen una zapatilla muy amortiguada. Se puede comprar por 78 euros en Wiggle.
La nueva K-Swiss Konesic es una zapatilla de entreno de 354 gramos para corredores con pronación severa que no lleguen a 80 kgs y que precisen de una zapatilla robusta, estable y duradera para entrenar larga distancia. Es muy fresca por lo que puede resultar ideal para el verano. Se puede comprar por 86 euros en Wiggle.
Las K-Swiss Ultra Natural Run II Ironman son unas zapatillas de competición para triathlon, que lógicamente también se pueden utilizar para carrera normal, donde su principal ventaja es la ligereza y sujección. Con 255 gramos y una amortiguación algo justa y poco flexible, dudo que sea la zapatilla ideal para correr un ironman o símplemente una maratón, a no ser que seamos muy rápidos y nuestro peso esté por debajo de 70 o 75 kgs. Desde luego es muy estable y lleva algunos detalles para el drenaje del agua. La única diferencia con la «K-Swiss Ultra Natural Run II» es que a esta se le ha añadido el texto «Ironman» en el flanco. Se pueden comprar por 69 euros en Wiggle.
La K-Swiss Keahou II ha comenzado a cosechar éxitos sin prácticamente haber pisado el asfalto. Después de una inversión bastante fuerte en publicidad en Estados Unidos y algunos paises de Europa (incluído España), la marca está comenzando a hacerse un hueco entre las estanterías de las tiendas especializadas de running utilizando como cabeza de cartel este interesante modelo de gama alta pensado para corredores neutros rápidos y no excesivamente ligeros que busquen una zapatilla con buena estabilidad, no muy pesada (312 gramos) y fresca. Con un precio de 71 euros en Wiggle, es una opción que en tiempos de crisis no debería ser obviada.
La K-Swiss Konejo II parece que está comenzando a calar en Europa. Es una zapatilla de gama alta de 340 gramos para corredores neutros con una amortiguación muy buena. En esta versión se ha mejorado la estabilidad y control aportando un poco más de soporte en el arco. Los reportes de la zapatilla son muy buenos, especialmente en lo relativo a su velocidad y flexibilidad. Muchos prueban esta zapatilla y se la quedan. Ideal para entreno de largas distancias con total seguridad en corredores de hasta 80 Kgs. Se puede comprar por 76 euros en Wiggle.
Otra de las últimas novedades de K-Swiss es la K-Ona que con sus 255 gramos es ideal para competición o entreno rápido. Entre sus muchas cualidades destaca la transpirabilidad y secado rápido de la zapatilla, de ahí que al igual que toda la gama K-Swiss para running, sea muy utilizada en triathlon. Está aconsejada para corredores de hasta 75 kgs y distancias no muy grandes. Se puede comprar en la tienda K-Swiss por 70 euros.
A nivel de running las K-Swiss son prácticamente inexistentes en el continente europeo pese al gran auge que están adquiriendo en América y en algunos paises de Asia. Uno de los últimos modelos es la Run One-miSoul Tech, que destaca por su versatilidad al tener dos plantillas intercambiables, una para velocidad y otra para amortiguación extra. Muy usada por triathletas, los comentarios sobre esta zapatilla neutra son realmente buenos. Está pensada para corredores pesados entre 75 y 100 kgs que no excedan entrenamientos superiores a los 10 o 15 kms. Se puede comprar en Estados Unidos por 100 euros en la tienda de K-Swiss.
