Estamos ante una zapatilla buena o muy buena de Mizuno, algo inédita en España, pero con muy buenos adeptos en Inglaterra, Alemania, Estados Unidos y Japón. Se trata de una zapatilla de competición para corredores muy rápidos, pisada neutra y peso bajo. La amortiguación es moderada, su transpirabilidad muy alta y su peso muy ligero. Al ser una zapatilla de competición, si la usas mucho en menos de 400 o 500 kms, tendrás que tirarla. Cuesta unos 80 euros en Inglaterra.